Un frío malestar
Por Patricia
¿Sientes un poquito de calor? ¿Este crece y se vuelve agobiante? Parece no haber otra solución a esto más que ponerse de pie, acercarse al aire acondicionado de la habitación y, con ello, refrescar el ambiente en el que nos encontramos. El calentamiento global deja de sentirse, ya no hay más preocupación por el clima. Gracias a ese pequeño aparato que tenemos ya no hay más aire caliente y todo regresa a la normalidad. Nada más falso.
El aire acondicionado toma el aire que está presente y lo acondiciona a una temperatura específica. Esto, podría pensarse, disminuye el calentamiento, ya que se encarga de expulsar un aire frío y vuelve el aire a la “normalidad”. Sin embargo, producir este aire toma energía, la cual genera gases que afectan a la atmósfera. Estos gases calientan más la tierra y el aire, por lo que, naturalmente, se sentirá más calor y, por lo tanto, se subirá la intensidad del aire acondicionado y así se termina en un círculo.
Este aparato, al igual que la calefacción, alteran la temperatura natural de un lugar, por lo que afecta indirectamente al clima. Así, se ha visto que por cada grado de temperatura menos, el gasto de energía aumenta en un ocho por ciento.
Ahora ¿qué podemos hacer? Existen formas más fáciles y caseras para ambiental un lugar. Así, en vez de usar el calefactor puede optarse por adherir cinta aislante en los bordes de las ventanas en los meses de frío, y en verano, es mejor optar por un ventilador eléctrico que consume y genera una menor cantidad de energía asesina.
¿Lo pensarás dos veces antes de usar tu aire acondicionado?